Sin nada más...

Con las manos vacías me presento al mundo, únicamente ofrezco unas palabras que puedan llegar a la gente que vive aislada de sí misma y ayudar a ver lo que su interior, y el mundo entero, quiere hacerle saber.

martes, 20 de diciembre de 2011

Esperaré para dejar de soñar...


Una voz sonó a mis espaldas, una voz que mi cabeza ansiaba volver a oír, esa voz que hacía que mi corazón comenzase a correr dentro de mi pecho. Giré mi cabeza y mis ojos volvieron a brillar, mi corazón continuó aumentando su intensidad y mi respiración también se aceleró. Allí estaba ella junto a mí, un día cualquiera, que prometía ser otro más en mi monótona existencia. Su sonrisa hizo que a mi parecer en cada gota de lluvia se reflejara un nuevo rayo de sol iluminando todo lo que nos rodeaba. Devolví la sonrisa de forma involuntaria e instintivamente los dos comenzamos a andar sin mencionar palabra alguna.
Pasaron horas sin necesidad de hablar, nosotros continuamos andando, ajenos a todo, era suficiente con nuestra mutua compañía y dejar que nuestras miradas dijesen todo por nosotros. Así fue hasta llegar a un precipicio que ninguno pudimos ver; en ese momento caí, ella quedó arriba, diciendo adiós con la mano como si de algo habitual se tratase, y la perdí de vista mientras me sumergía en una profunda oscuridad.
Me desperté bruscamente, fatigado. Entonces ella me dijo:
-¿Estás bien? Parecía que tenías un sueño agradable hasta hace un momento... ¿Qué pasó?
-Todo era genial, caminaba a tu lado hasta que el mundo se desvaneció en una completa oscuridad arrancándome de tu lado...
-Ahora te presentaré yo otro sueño: Vivimos rodeados de sonrisas aparentemente sin sentido, sin nada que nos separe cada noche o por varios días; haciendo una vida al margen de normas que la sociedad cree en nuestra contra. Ese sueño tiene nombre, y se llama: nuestra realidad.

Fdo.: ...

jueves, 1 de diciembre de 2011

No elegí ser así...

(Esto es producto de un pésima noche, necesitaba desahogarme, no es nada trascendental, solo comentarios sobre mi persona)


¿Crees que me gusta ser así? Saber que estás mal, que necesitas mi apoyo, que necesitas que esté lo más cerca posible de ti y sea capaz de animarte... ¿Y no ser capaz de hacerlo? Porque no me salen las palabras, porque no soy capaz de encontrar nada que crea que pueda animarte... Por buscar una sonrisa, por ser un egoísta buscando esa sonrisa que tanto adoro; sin pensar que, es cierto, primero debo saber levantarte el ánimo. Debo aprender que ahora esto es cosa de dos, olvidarme de mi como centro, pensar en un equilibrio... Y lo sé, realmente, sé lo que tengo que hacer... ¿Por qué no lo hago? Eso me gustaría saber a mí...
No puedo seguir siendo así, no puedo pretender que si tú te encuentras mal por algún motivo yo decaiga en ese momento, siendo tú quien consigue ayudarme a mí; y siendo tú quien no solo se va con los problemas que ya te tenías, sino que te he añadido los míos. ¿Por qué soy tan inconsciente? ¿Por qué tengo esta forma de ser tan deprimente? ¿Por qué no puedo llegar a ser útil?.... ¿Por qué no puedo centrarme?
Señoras, señores... Tú... Todos, aquí y ahora os digo... Necesito madurar a marchas forzadas, ¿podré cambiar?¿Podré serte de ayuda alguna vez?
Siento que hasta ahora haya sido así, de verdad, no me gusta, de hecho, me repugna, me siento un completo inútil. Perdóname... O no...


Fdo.: ...